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la boca
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Inicio > Historias > La Costa De Las Naranjas
2008-11-06
)

La Costa De Las Naranjas
2008-11-06

Publicado en Diario de Noticias
MILENIO, Jueves 6 de noviembre de 2008


El 9 de noviembre de 1938 José escribe una carta a su mujer, contándole que ahora está en la costa de Castellón, y que ya han probado las naranjas nuevas. Está preocupado porque en el pueblo ya hará frío y lo mismo ella no tiene leña suficiente, ni para ella ni para sus hijos. La más pequeña había nacido 20 días antes de que él fuera movilizado al frente. José tenía 30 años entonces, y una semana antes había conseguido enviar un paquete con zapatos para los niños. También le ha llegado, a la segunda compañía, la carta que Filomena le escribiera hace un mes. Al mayor de sus hijos le dice: “Ricardo, no puedes figurarte lo que me acuerdo de tí cuando me pongo a comer una naranja. Si con la vista pudiera mandártelas, más sé que las comerías tú que yo, que te gustan más que las algarrobas”. A los niños les manda millones de besos, manda abrazos a su familia, y le dedica todo el amor y la alegría que tiene a su mujer.

Esa carta llegó a su destino tiempo después, dentro de la cartera de José con el carnet militar, algún dinero republicano y junto a un certificado de defunción con fecha del 10 de noviembre, un día después de haberla escrito. Filomena guardó para sí esos últimos recuerdos de su marido toda la vida. Sobrevivió a la ausencia, a la guerra, a la posguerra, y cuando murió hace unos pocos años apareció la carta.

La pasada noche de difuntos la hija de Filomena y José encendió una vela (no encontró una mariposa para dejarla flotando en una taza, que es lo que su madre hacía) en recuerdo a sus padres muertos, y a otros muertos que el tiempo siempre trae. Nunca conoció en vida a su padre porque tenía un año cuando se fue a la guerra. Nada conoce del lugar donde cayó, esa costa de naranjas nuevas en noviembre, hace ahora setenta años. Pero toda su vida quedó marcada, como la de tantos millones de personas, por ese hecho. El otro día, con ella lloramos un poco al ver la vela encendida.

2008-11-06 10:42 Enlace

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Comentarios

1
De: tollendo Fecha: 2008-11-06 10:59

Gran artículo, Javier. Muy emotivo.
Gracias.



2
De: César Fecha: 2008-11-06 12:36

¡Habrá un día en que todos, al levantar la vista, veamos una tierra que ponga Libertad!...



3
De: Iván Fecha: 2008-11-07 20:28

Y aun algunos pintas rememoran eso con orgullo, el de los matones.

Buena entrada Javier.



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